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miércoles, 30 de abril de 2014

Las Terrazas en Becerril de la Sierra


Un grupo de estudiantes hemos decidido celebrar el final del curso con una semana de antelación, y por recomendación de uno de ellos, nos hemos trasladado a Becerril de la Sierra, que la mayoría ya habíamos visitado en más de una ocasión, pero no concretamente este restaurante, que por tratarse de un día de entre semana, no teníamos problemas para reservar, otra cosa ocurre los fines de semana, que casi siempre esta al completo.

El objetivo prioritario era tomar el Arroz con bogavante y acompañarlo con unas entradas compartidas entre los comensales.

Mientras estábamos encontrando los acompañantes del arroz, yo me puse a buscar en la muy decente carta de vinos del restaurante, y pretendiendo encontrar el vino con mejor relación calidad/precio dentro de nuestro muy acotado nivel de gasto encontré este Somontano Crianza, Viñas del Vero:

El precio del vino, 12€ me pareció una muy buena opción, y desde aquí aprovecho para recomendar el Viñas del Vero Reserva Gran Vos, uno de mis grandes favoritos, aunque el precio no se parece mucho.

Pero vayamos ya con los platos que elegimos como entrantes para compartir, que fueron:

Calamares a la romana
Ensalada de berujas
Boquerones fritos
Coquinas a la plancha

Me permito destacar en el tamaño de las fotos los platos que más me gustaron, aunque todos estaban buenísimos.
Los calamares, auténticos y muy bien fritos, y los boquerones del tamaño justo para comerlo todo, no sé porqué las mujeres se empeñan en comer todo menos la espina, a mi ese tamaño de boquerones me invita a comerlo todo, y me resulta exquisito.
Tengo que destacar la ensalada de berujas, que a pesar de que la gran mayoría de los comensales éramos 'talluditos' había varios que nunca habían probado las berujas, un placer de Dioses que no sé si afortunada o desgraciadamente, es un producto que no se encuentra a la venta en los supermercados, y solo se puede tomar en algunos restaurantes, menos de los que quisiéramos. La ensalada estaba exquisita, además de berujas (también llamadas pamplinas en algunos lugares) había tomate, cebolla, aceitunas y taquitos de bacon frito, perfectamente aliñada y triunfó entre todos los comensales.

Y que voy a decir de las Coquinas a la plancha, seguramente uno de los platos favoritos de mi mujer, y por ende, mío, ya que casi siempre que lo vemos en una carta, si el restaurante, es de nuestra confianza, lo pedimos. Y estas coquinas demuestran que el restaurante en el que estábamos es de confianza, un plato exquisito, que hay que rematar mojando un poquito de pan en el aceite sobrante, lo justo para dejar el cuerpo listo para acometer el arroz con bogavante.

No voy a decir que es el mejor que me he tomado, eso sería rebajar a otros muchos arroces a lo largo de la geografía nacional, pero me tomé tres platos de arroz, amén de rebañar convenientemente los trozos de marisco. Sabor intenso, arroz casi en mi punto, y evidentemente raciones muy generosas y que los nueve comensales elogiamos, amén de repetir, y eso solo se hace cuando el sabor es muy bueno, como era el caso.

En resumen, un restaurante con una cocina exquisita, un servicio perfecto, y un local muy apropiado para los distintos tipos de mesas, en función del número de comensales.

Destacar que el precio por comensal, todo incluido fue inferior a 30€ lo que lo convierte en un restaurante absolutamente recomendable.


domingo, 13 de abril de 2014

Cocido de Taba - Parador de Chinchón

El cocido de Taba es muy típico en Chinchón, y precisamente por estas fechas, finales del invierno y comienzo de primavera, tomamos un buen cocido aquí hace ya muchos años los entonces miembros de GARBANZO, concretamente en Febrero de 1998, y aunque la Asociación no ha vuelto, varios de los miembros si que hemos repetido, porque además, visitar Chinchón siempre es un placer.
En esta ocasión nos hemos juntado un grupo de amigos, algunos con bastantes familiares e incluso con un niña de tres mesecitos y otro de casi dos años.
Tras las cervecitas y vinitos que tomamos en la maravillosa Plaza de Chichón no trasladamos al Parador, separado de la Plaza por lo menos treinta metros.
Y ya vamos con la descripción gastronómica del evento. Para información de los lectores, el precio del cocido era de 22€ sin incluir bebidas o 27€ incluyéndolas pero en la que el vino era un joven de la zona. Optamos por el cocido simple eligiendo el vino nosotros, también era de la zona, pero era Crianza:

No diremos que sea un buen vino, pero parece que en la zona ya se empieza a mejorar con los crianzas, así que acompañamos el cocido dignamente. Y empezamos con los aperitivos que en el cartel que inicia este post se describen como AntesDeBoda, y que constaba de Albondiguillas de menudo de pan con cocido de antesdeayer, Garbanzos mareados cocidos y fritos en sartén, aceitunas aliñadas, pepinillos y cebollas rojas:

Así que catando el vino y tomando estos aperitivos hicimos tiempo hasta la llegada del primer vuelco del cocido, la sopa, servida sin caldo, como lo hacen en algún restaurante madrileño de gran prestigio en el mundo del cocido, aunque no muy recomendado por mí ni por los miembros de GARBANZO, el caldo acompañado para cada dos comensales:
Y este era el aspecto de mi plato de sopa tras echarle el caldo correspondiente:

Los fideos estaban en el punto adecuado, pero era lo mejor del plato, el sabor no acompañaba, y yo tuve la inspiración de echarle unos garbanzos del aperitivo para arreglar algo el sabor, así que el inicio del cocido no era bueno, pero relativamente fácil de mejorar, que no arreglar.
Lo que resultó impresionante fue la presentación en cazuela de barro del segundo vuelco, aclararé que lo de cazuela de barro está presente en todos los platos:

Esta presentación le valió el premio al Cocido más Innovador en la II Ruta del Cocido Madrileño, y la verdad es que mejoró mucho al algo decepcionante principio de la sopa, los ingredientes de cocido eran: Garbanzos de Fuentesauco, col, cardillos, judías verdes, nabos y patatas en la parte vegetal, y Cangrejos de río, morcillo, jamón, chorizo, tocino entreverado, gallina, cuello de ganso y hueso de taba en la parte carnívora, yo me serví el vuelco completo:

Aunque no se muestre en la foto, en la cazuela del último vuelco había bastante caldo, y todo venía impregnado de su sabor y de una temperatura adecuada, y en este vuelco no puedo decir algo mal de ningún ingrediente, todo me gustó, quizás lo más insípido para mi fueran los cangrejos de río,  algo que por primera he visto poner en un cocido, y experiencia en estos platos si que tengo. Pero si tengo que destacar algo, es lo que siempre dejo para el final como colofón, y fue el hueso de caña, que aquí llaman hueso de taba:

Lo muestro ya extraído del hueso, ha sido de los más espectaculares, en sabor, de los que he comido, mayores he comido muchos, pero tan sabrosos, muy pocos.
Cerramos con unos postres típicos de la zona, Bartolillos y pestiños:
 Para mí gusto demasiado dulces, pero de buen sabor.

Como resumen general del cocido, muy digno, como en todos los Paradores, el servicio excepcional, pero lo mejor de todo, la compañía, un equipo de personas que la mayoría nos conocemos desde hace muchos años, aunque como casi siempre, se van incorporando caras nuevas y aportando ideas para degustar innovadores cocidos.